Está muy próximo el día de San Valentín y pensando pensando he decidido hablar un poco de Enoshima.
Enoshima (江の島) es una pequeña isla de solo 4 kilómetros de diámetro, muy cerca de Kamakura, a la que podemos llegar en un corto paseo en tren por la costa. Una vez nos bajamos del tren tenemos que andar unos metros hasta llegar a la playa por donde cruzaremos un puente de unos 600 metros que une la isla con la costa.
En la isla nos vamos a encontrar con un puerto deportivo y una colina que únicamente vamos a poder recorrer a pie, aunque para los más vagos hay escaleras mecánicas, eso sí, de pago.
A lo largo de la subida nos vamos a encontrar con varios santuarios que se conocen en su conjunto como Santuario de Enoshima, todos ellos están dedicados a la diosa Benten, que es popular por atraer la buena fortuna, la riqueza, la música y el conocimiento. Popularmente se cree que Enoshima fue creado a raíz de un enfrentamiento de la diosa con un dragón de cinco cabezas.
En la parte trasera de la isla tenemos las Cuevas Iwaya. En la primera cueva se pueden encontrar varias estatuas budistas y la segunda está dedicada al dragón que cuenta la leyenda. Personalmente no creo que estas cuevas tengan mucho interés.
En la parte superior de la colina nos encontramos con un jardín llamado Samuel Cocking Garden que es ideal para los enamorados y uno de las visitas estrella de nuestros viajes. Eso es debido a los increíblemente bonitos atardeceres que se pueden ver desde la parte superior del mirador, que también hace la función de faro. El Jardín fue construido en el siglo XIX por el británico Samuel Cocking que le da nombre.
Esta isla es ideal para las parejitas que quieran pasar una tarde agradable y ver un atardecer romántico y lleno de magia.