Muchos somos los que admiramos a Hayaho Miyazaki, pero muy pocos los que hacen algo por demostrarlo, entre los que me incluyo.
Aunque, como digo, son pocos los que hacen algo a veces esos pocos hacen cosas increíbles y ese es el caso del francés Gwenn Germaine que trabajó durante cinco meses en lo que fue su trabajo de fin de carrera y además su homenaje personal a esa persona que admiramos, el Señor Miyazaki.
El corto, de alrededor de dos minutos, titulado Celles et Ceux des Cimes et Cieux, nos traslada a un espacio con multitud de referencias a enormes películas como la Princesa Mononoke o El viaje de Chihiro. La historia nos cuenta las peripecias que tiene que pasar un joven que vive en un árbol y que por casualidades del destino, o desgracias, cae hasta el bosque y tiene que esforzarse por volver a llegar a su hogar.
Como podéis ver no está nada mal para ser un estudiante que acaba de terminar la carrera, de hecho yo diría que es para sobresaliente. Quién sabe, quizás en un futuro no muy lejano veamos más trabajos del joven Gwenn.
Fuente: Playgroundmag